Luces y Alegría por los Maestros







Nuevamente la noche del 27 de enero se iluminó con las luces de las antorchas de jóvenes que no dejan morir al Maestro, en ninguno de los aniversarios de su nacimiento. Como aquel 1953 en que la Generación del Centenario estrenó la que devendría una tradición de resistencia y lucha por la justicia, jóvenes estudiantes y trabajadores de Moa asaltaron las principales calles de la ciudad a la memoria de los más grandes cubanos de la historia.

El Comandante en Jefe y José Martí son uno en pensamiento y proyección nacional y universal, y así lo comprenden las nuevas generaciones, convocadas a beber de uno y otro, que son la Revolución misma en más de UN siglo, pues como dijera el poeta, lo que prometió Martí, Fidel te lo cumplió.

CIENTOS de estudiantes de la FEU del Instituto Superior Minero Metalúrgico, la Filial de Ciencias Médicas, de la Federación Estudiantil de la Enseñanza Media, jóvenes de varias empresas del níquel y otros sectores, junto a las autoridades del Partido, el Gobierno, la UJC, la Central de Trabajadores de Cuba, y pueblo en general, llegaron hasta el centro de la ciudad, portando además del entusiasmo, la consigna y convicción ¡Yo soy Fidel!


Allí, también en homenaje al Héroe Nacional y al Comandante, se ofreció una cantata con lo mejor del talento aficionado del municipio. Saylis Díaz Cruz, presidenta de la FEEM, Arley Díaz Guilarte, presidente de la FEU de Ciencias Médicas, y Roeldis Rodríguez Hernández, Secretario General de la UJC, ratificaron en nombre de los jóvenes moenses, el compromiso de mantenerse leales a los principios martianos y fidelistas, y seguir construyendo la Revolución Socialista de “los pobres de la Tierra”, “…de los humildes, por los humildes y para los humildes”.

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